Las Bodas de Roble8 min read

Las bodas de roble conmemoran los veintiún años de matrimonio de una pareja. Se trata de un aniversario muy especial ya que supone haber superado las dos décadas de vida en pareja, algo que simboliza el amor que hay entre ambos.

En este artículo te contamos en qué consisten las bodas de roble, cuáles son los regalos más apropiados para esta fecha y además, te ofrecemos ideas de celebración para que este aniversario se convierta en un día muy especial para la pareja.

Significado de las bodas de roble

Las bodas de roble se celebran cuando un matrimonio lleva veintiún años casado. Es obvio que a estas alturas existe una gran solidez en la pareja además de mucha resistencia ante las adversidades. En este tiempo, ambos se han llegado a conocer al máximo el uno al otro y además, han aprendido mucho acerca del matrimonio y la vida en pareja. Por ello, el roble simboliza este aniversario puesto que siempre ha sido emblema de la fuerza, la resistencia y la sabiduría.

Además del roble, hay otros elementos de la naturaleza que también sirven para simbolizar este aniversario. Uno de ellos es la flor del olivo ya que transmite paz, algo necesario en un matrimonio tan longevo. Además, también sirve como símbolo la piedra preciosa conocida como ojo de buey y que ayuda a aumentar la fuerza de voluntad y a admitir las responsabilidades que uno adquiere dentro del matrimonio.

Regalos para las bodas de roble

La tradición dice que la pareja debe intercambiar regalos en los que predomine el elemento que identifica al aniversario de bodas correspondiente. Por ello, para celebrar su veintiún aniversario, deberán hacerse regalos donde predomine el roble.

Aquí dejamos algunas ideas pero será el propio matrimonio quien mejor sabrá complacer a su pareja haciendo uso del tiempo que llevan juntos, de su creatividad y de su ilusión.

• Anillos en cajita de roble. Un regalo sencillo, especial y significativo es renovar los anillos de compromiso y presentarlos en una caja de roble tallada con los nombres de la pareja y la fecha de la boda. Los anillos, además, pueden estar decorados con ojo de buey, la piedra preciosa que se corresponde con este aniversario de boda.
• Soporte para botellas de vino. Es útil, es elegante y el obsequio perfecto para los amantes del vino. Existen muchos diseños fabricados con madera de roble así que el desafío está en encontrar el adecuado y conseguir personalizarlo mediante algún grabado especial.
• Organizador de escritorio. Quizá los miembros de la pareja o al menos uno de ellos, pasa mucho tiempo sentado frente a un escritorio ya sea por cuestiones de trabajo o porque alguna afición así se lo exige. Existen organizadores fabricados en roble de todos los modelos y si se personaliza con algún mensaje, fecha o nombre especial, puede ser un recordatorio diario de un aniversario tan especial.

• Tablas para la cocina. Esto es perfecto para las parejas aficionadas a la cocina y especialmente, a cocinar juntos. Hoy día se hacen modelos preciosos de tablas de cortar hechas en madera de roble, pero también hay bandejas especiales para presentar el sushi y otras que sirven para llevar la comida. Y por supuesto, no podemos olvidar los salvamanteles. Hay páginas en Internet en las que se pueden pedir personalizados, ¿qué tal encargar uno con los nombres de la pareja?
• Un marco para fotos. Es lo más clásico y quizá suene hasta predecible pero se pueden hacer cosas especiales con un marco para fotos si se pone interés y creatividad. ¿Por qué comprar el típico marco cuadrado? Se puede buscar de alguna forma divertida o incluso significativa, con algún grabado o dibujo que tenga sentido para la pareja, y rematar esos detalles con una foto que evoque uno de los recuerdos más especiales que se hayan creado en esos veintiún años de matrimonio.
• Joyas en forma de hoja de roble. La hoja de roble es un motivo sencillo y reconocible que puede adaptarse prácticamente a cualquier tipo de joya. Puede usarse como pendientes, colgante y también rematando un anillo. Existen diademas y tiaras muy sencillas formadas por una línea de hojas de roble que dan un aspecto romántico y sencillo. Para el caso de los hombres, dos pequeñas hojas de roble pueden hacer la función de gemelos y ese motivo también se puede emplear como alfiler de corbata.

Ideas para celebrar

A estas alturas y tras haber celebrado una veintena de aniversarios quizá ea difícil sorprender o hacer algo diferente. En cualquier caso, aquí van algunas ideas que se pueden reciclar y modificar para que se ajusten a los gustos y preferencias de la pareja. ¡Lo bonito es que todo sea lo más personal posible!

La primera idea es hacer un picnic a los pies de un roble, como no podía ser de otra manera. Si no hay ninguno en la localidad en la que reside la pareja, es la excusa perfecta para realizar una escapada hacia un lugar especial en el que exista un bosque de robles en el que disfrutar de un día a solas, amparados por la resistencia y la sabiduría que emana de árboles tan impresionantes.

Si no se ha hecho en alguno de los aniversarios anteriores, quizá sea la ocasión para celebrar una segunda boda. De hecho, ni siquiera tiene por qué ser una réplica de la original sino algo distinto y sorprendente. Quizá la pareja pueda aprovechar para cumplir alguna ilusión que quedó pendiente respecto a ese tema o simplemente hacer algo más moderno y novedoso. Lo importante es que la pareja se divierta y con ellos, sus amigos y familiares.

Siguiendo la idea anterior, también podrían recrear algunas de las citas o situaciones que recuerden con cariño o diversión. Quizá regresar a algún lugar en el que se lo pasaron bien y les hubiera gustado quedarse más días, o volver a aquel restaurante que tanto les gustó y al que no han tenido ocasión de poder regresar.

Otra idea es celebrar una comida o cena en casa en la que puede estar tan solo la pareja o hacerse acompañar por los familiares más cercanos y los amigos íntimos. En esta celebración, el roble puede estar presente de muchas maneras. Por ejemplo, en la vajilla, que puede estar decorada con hojas de roble al igual que la mantelería. Si se trata de una reunión informal con picoteo pueden usarse incluso platos y vasos de madera de roble.

En el ámbito textil también se puede usar el roble para ambientar este aniversario de la forma adecuada. Más allá de la mantelería que se ha mencionado más arriba, las características hojas de roble pueden aparecer en cortinas y fundas de cojín y también en forma de ceniceros, platos, marcos de fotos, cartel de bienvenida, posavasos y, en fin, en todo aquello donde llegue la imaginación y la creatividad de la pareja.

También se puede hacer algo atrevido, ¿qué tal la idea de hacerse un tatuaje juntos que represente esos veintiún años que llevan juntos? La pareja puede buscar un símbolo especial, algo que caracterice su relación, y marcárselo en la piel como un recordatorio de su matrimonio, ¿quizá una pequeña hoja de roble fuerte y resistente como ellos? Si no quieren que el tatuaje sea permanente, pueden hacerlo con henna, que se elimina con el tiempo.

Si la pareja son amantes de la música clásica pueden acudir juntos a un concierto de instrumentos de madera en homenaje a las bodas de roble. Quizá un cuarteto de cuerda, un concierto íntimo que se celebre en un lugar especial que se puede rematar con una cena romántica y un paseo nocturno por algún lugar evocador en el que charlar a solas, dejando a un lado la rutina del día a día.

Otra opción muy divertida es hacerse una sesión de fotos algo inusual. Hoy día hay muchos estudios de fotografía que preparan atrezzo y vestuario para hacer fotografías inolvidables pero también divertidas. La pareja puede vestirse de vampiros, de cowboys, de estilo años 20… Y si son atrevidos, también pueden hacer una sesión privada con fotos picantes solo para disfrute de la pareja.

Un plan muy sencillo es quedarse en casa a solas, preparar juntos unos buenos aperitivos y escuchar una lista de música con todas aquellas canciones que han ido marcando los momentos más especiales de la pareja a lo largo de sus veintiún años de matrimonio. La música tiene la facultad de transmitir emociones y seguro que ese día de escuchar y rememorar canciones logra arrancar risas, lágrimas y sobre todo, mucho amor y ternura.

Y siguiendo en la misma línea, la pareja puede reservarse un fin de semana para ver aquellas películas que también tengan algún significado especial para ellos. Quizá la primera película que vieron juntos en el cine o una película que refleje su propia historia de amor o simplemente una que les haya hecho reír a carcajadas. Lo importante, siempre, es compartir.